
La Numerología nos invita a sumergirnos en el fascinante mundo de las energías y frecuencias numéricas. Cada cifra resuena en nuestro interior, empujándonos a observar cómo se despliega en nuestra realidad.
Imagina que las letras de tu nombre, tu fecha de nacimiento e incluso el día de hoy, forman parte de una melodía cósmica. Si afinamos nuestros sentidos a esta sintonía numérica, descubriremos una herramienta poderosa para nuestro crecimiento. Cada número nos propone experiencias únicas. Al desvelar su significado más profundo, podemos elegir conscientemente cómo vivirlas y abrirnos a nuevas perspectivas.
Los números, como todo en la vida, poseen dos extremos. Nuestro camino es el de buscar ese equilibrio tan preciado. Y sí, es natural que a veces estemos en desarmonía; la vida nos lleva por todas las vibraciones numéricas, enriqueciendo nuestro viaje.
A través de la Numerología, podemos desenterrar nuestras capacidades ocultas, virtudes, talentos y las características que nos definen. Pero también nos ilumina para identificar los desafíos y esas partes más complejas que estamos destinados a superar.
Hoy te cuento breve qué sintonía tienen los tres primeros números, tal vez encuentras que te identificas con alguno:
El número Uno irradia una energía potente y ardiente, marcando el comienzo de un ciclo. Demuestra una fuerza y un coraje excepcionales para emprender, accionar y tomar decisiones con absoluta certeza. Es directo, concreto y actúa sin necesidad de consultar, asumiendo naturalmente un rol de liderazgo, lo que a veces le presenta un desafío al intentar trabajar en equipo. Su voluntad es inquebrantable y digna de admiración, capacitándose para afrontar cualquier obstáculo y avanzar sin titubeos. Este perfil impulsivo y concreto tiene como principal aprendizaje la capacidad de enfocar esa misma intensidad hacia su mundo emocional, autorizándose a reconocer y aceptar su faceta sensible.
El número Dos tendrá la facilidad de cooperar, desolidarizarse con otra persona, estará acompañando en el sentir de un par, así puede olvidarse de su sentir y moverse al compás de otra persona. Aquí es donde se presenta su indecisión cuando quiere hacer con autonomía propia, necesitará del apoyo de otra persona. La sensibilidad será su gran cualidad, pero también puede llevarlo a olvidar su presencia en sí. Este número cuando está en equilibrio encuentra cómo acompañar sin dejarse someter o sentirse víctima de situaciones. En su mejor versión aprende a ser par, a estar en compañía, pero no fundirse a otra persona. En este caso el aprendizaje es ver su propia parte sensible y poder validarse, accionando desde sí misma.
El número tres tiene innata una capacidad de crear, de mostrar desde su hacer el sentir, es la conjunción del uno y dos, donde su don reside en ser creativa, de expresar aquello que puede tener en su interior. Es un número que tiene sensibilidad pero que la utiliza como instrumento, el arte o cualquier forma de impulsarse hacia afuera con lo que siente es su gran capacidad. En este tres puede haber una necesidad de aprobación, una búsqueda de reconocimiento, sintiendo que lo que hace no tiene el valor suficiente y no pudiendo en ocasiones sacar su talento a relucir. Busca continuamente escenarios donde mostrarse para ser visto, por eso le gusta socializar y tiene grupos de amistades, donde se destaca por atraer y compartir su alegría. A la hora de expresar lo que siente sinceramente tiene dificultades, porque en su soledad se siente escuchado, y reconocido por muy pocas personas. Le cuesta entonces ser leal a lo que es, porque no tiene para sí lo mismo que muestra en su faceta artística.
El Tres nace con una habilidad natural para crear y exteriorizar sus emociones. Es la síntesis del uno y el dos, y su don supremo es la creatividad: la capacidad de expresar aquello que reside en su interior. Aunque sensato, el Tres utiliza su sensibilidad como una herramienta; el arte o cualquier medio que le permita proyectar sus sentimientos hacia afuera es su mayor fortaleza. En ocasiones, este número puede lidiar con una necesidad de aprobación y una búsqueda constante de reconocimiento, sintiendo que lo que produce no es lo suficientemente valioso y dificultando así la plena expresión de su talento. Busca incansablemente plataformas donde pueda ser visto, lo que lo convierte en un ser sociable, con amplios círculos de amigos, donde brilla por su carisma y alegría. Paradójicamente, al Tres le resulta difícil compartir sus verdaderos sentimientos, ya que en su soledad se siente realmente comprendido y valorado por muy pocas personas. Esta dicotomía puede llevar a una deslealtad con su propio ser, pues lo que presenta artísticamente no siempre se alinea con su mundo interno.
¿Te llama la atención este universo? Ábrete a la Numerología para desentrañar los secretos de tu ser y, si lo deseas, guiar a otros en su propia conexión con los números.»